Central se impuso por 2-1 ante el Racing córdobes

Le costó, pero valió la pena

Después de cuatro fechas, Central volvió a ganar. Fue 2 a 1 sobre el Racing cordobés.

Había que ganar como sea, no importaba demasiado la forma y los caminos a tomar...sólo ganar. Pues Central Córdoba así lo hizo y lo cumplió con creces al vencer a Racing de Córdoba por 2 a 1 en el marco de la 11ª fecha del Argentino A.
De esta manera cortó una racha de cuatro partidos sin ganar y además logró un poco más de oxígeno a la realidad futbolística que arrastraba previamente.
Mucha garra, temperamento, solidez en la marca y golpear en el momento justo fueron las claves del “ferro” ante un rival que no ofreció demasiado para aspirar a algo más.
Sebastián Sáez de penal y el tucumano Javier Contreras, uno en cada período, marcaron los goles ferroviarios mientras que Diego Velázquez había igualado el encuentro en la etapa inicial.
De esta manera, Central Córdoba continúa en la última colocación de la zona 2, pero logró achicar la distancia y mejorar su imagen.
Desde el inicio, el conjunto santiagueño salió con una actitud elogiable. Presionó en la mitad de la cancha, achicó los espacios y fue inteligente a la hora de atacar, porque abrió la cancha con García Chamut y Salvatierra por las bandas.
En una incursión de Albarracín al área cordobesa, fue derribado por Fernández, acción que Maitini no dudó en cobrar la pena máxima.
A los 13 minutos, Sebastián Sáez se encargó de cambiar penal por gol con un remate a la derecha de Diego Antonio, que movió su cuerpo hacia el otro sector.
Más que justicia en el Oeste porque Central Córdoba fue el equipo local que intentó romper el mezquino planteamiento de Racing de Córdoba.
Pero las injusticias, que por ahí el fútbol suele castigar a los que más producen, en este caso benefició a Racing que en la única jugada del primer tiempo marcó el gol del empate a los 33 minutos a través de Diego Velázquez, al anticipar en el primer palo un centro desde la derecha de Bergese. La jugada se inició con una mala entrega del pibe Moreno en la mitad de la cancha.

Complemento
En la segunda mitad nuevamente Central Córdoba salió a prepotear a Racing (C) y le planteó el partido en la mitad de la cancha. Suárez y Moreno desdoblaron los esfuerzos y García Chamut se soltó más, dejó de lado el duelo con el “Negro” Molina y atacó más, mientras que Salvatierra transitó por todo el sector derecho, bajó, ayudó en la marca y hasta complicó con su velocidad a la última línea de la academia cordobesa.
En este período, el pibe Sergio Salto desató su desfachatez. Con tacos, driblings y gambetas contagió al equipo y de esa manera muchos se soltaron y agudizaron su visión para buscar el gol. El propio Salto tuvo una chance para concretar a los 9 minutos, pero no lo supo definir y el mismo pibe hizo una buena jugada a los 12, al desbordar y lanzar un centro que cruzó todo el área chica de Antonio sin que ningún compañero pudiera atreverse a atropellar y convertir.

Cambios y gol
En ese sentido, el “Vikingo” mandó a la cancha a Contreras y Giampietri buscando darle mayor volumen de juego con el “Máquina” en la función de enlace y con el tucumano para utilizar su “detector del gol”. El “Flaco” no defraudó y a los 30 minutos capturó un rebote dentro del área para empujar al gol un balón que Sáez remató y que Antonio la convirtió en rebote.
El delirio de todo el barrio Oeste sonó a desahogo y así lo hicieron saber al final, tras consumarse una victoria tan necesitada como el aire que cruzó por el estadio ferroviario en la tarde noche gris. Abrazos, festejos, cantos y lágrimas en el final, que por el momento continúa en la última posición de la zona 2. Quedan cinco finales y su juego con estilo guerrero romano (poca suavidad y mucha vehemencia), podría dejar este mal momento en el olvido.