Aniversario - Agua y Energía de festejo

Felices 69 años Agua y Energía

La institución bandeña Agua y Energía celebra un año más de vida institucional. Nacido en la localidad de Los Quiroga, el club comienza a crecer en vistas a un futuro prometedor.

El club Unión Dique nació en la localidad de Los Quiroga en la década del ‘40, por ese entonces se estaba construyendo una importante obra de ingeniería hidráulica que traería grandes beneficios al departamento Banda, ya que se trataba de un dique derivador.
La inmensa obra concentró a cinco mil trabajadores que llegaron de distintos lugares de la provincia y del país en busca de un puesto que les diera un mejor pasar económico. Tras varios meses de labor, muchos de los trabajadores se radicaron en la zona y se centró un significativo núcleo habitacional conformado por familias numerosas, siendo este el principal motivo por el cual tomaron la iniciativa de conformar una institución deportiva y recreativa a la cual denominaron “Unión Dique”.
En una asamblea que se realizó en el domicilio de la familia Iñiguez, el 20 de junio de 1941, quedó conformada la comisión directiva siendo el primer presidente Luís Campanini, secretario Eduardo Leyes y tesorero Rolando Saracco. También formaron parte de esta iniciativa Segundo Iñiguez, Teófilo Martínez, Oscar Alegre, Leocadio Figueroa, Meliton Guzmán, Amadeo Bravo, José Lizondo, Raúl Garay entre otros.
La premisa de estos hombres fue la conformación de un equipo de fútbol a fin de poder participar en torneos oficiales, por ese entonces se jugaría el primer campeonato nocturno de Santiago del Estero, organizado por el club Santiago.
Francisco Bravo, el primer arquero de la entidad deportiva recordó: “En ese entonces yo tenía 17 años y jugaba en el club del Río Dulce, vivía con mi madre y mis hermanos en El Cruce y un día llegaron a mi casa integrantes de la comisión de Unión Dique a ofrecerme trabajo con el fin de que yo forme parte del equipo. Como era menor de edad le pregunto a mi madre, que ya me había negado el permiso en otras oportunidades, si podía jugar en ese equipo y cuando supo que cada futbolista accedía a un puesto laboral me dijo que sí”.

El primer equipo
El primer equipo del club Unión Dique estaba conformado por: Francisco Bravo, “Toto” Rojas, Oscar “el sapo” Gerez, Roque Alustiza, Luís Villa y Pedro Tévez; Roberto Saavedra, “Chuli” Araujo, Tomasio Iñiguez, Elpidio Tévez y Basilio Tévez. En el banco de suplentes estaban Víctor Bolañez, Pedro Ledesma, entre otros. El primer técnico fue Oscar “Pechito” Suárez y Carlos Bonseilao.
“El partido presentación fue el 6 de enero de 1949, allí jugamos el primer partido en la liga y todos nos miraban como si fuéramos gente del campo que no podía competir. Nos enfrentamos con Central Argentino que tenía grandes jugadores y en el primer tiempo ya ganábamos 3 a 0″, expresó Francisco Bravo.
“Luego jugamos con Güemes y perdimos 1 a 0 -continuó- después en el tercer partido llegaron los goles del ‘Negro’ Saavedra, ‘Chuli’ Araujo y Elpidio Tévez se convierte en el ’señor’ de la cancha. También estaban Silver Suárez, “Mami” Córdoba, Cirilo Barraza, “Tino” Iñíguez, Osvaldo Dorado, “Ratita” Corvalán. Obtuvimos importantes puestos y por ese entonces ya el club contaba con su sede en La Guarida”.


Etapa de cambios y su llegada a La Banda
Uno de los dirigentes que trabajó denodadamente por la institución, Raúl Garay, rememoró: “Tras participar en varios torneos y a punto de militar en la primera división, se nos presentó un impedimento, pese a contar con una cancha reglamentaria, esta debía estar emplazada en La Banda o la ciudad Capital. Entonces un grupo de dirigentes viajamos a Buenos Aires y planteamos la situación a la empresa Agua y Energía. Las autoridades aceptaron construir una cancha ‘con todas las de la ley’ con una única condición, que llevara el nombre de la compañía, propuesta que aceptamos en forma inmediata”.
En una nueva reunión en la que participaron los dirigentes deportivos y las autoridades de la empresa Agua y Energía se firmó el acuerdo y en un predio de La Guarida se construyó la cancha reglamentaria con tribunas incluidas en el ya denominado Club Atlético Agua y Energía.
A mediados del ‘60, la institución se había afianzado tanto deportiva como económicamente, entonces resuelven mudar nuevamente la sede, esta vez a Puerto Nuevo, predio del parque Aguirre. Allí contando con la colaboración de socios, hinchas, amigos y simpatizantes se erigió otra cancha. A ese equipo se sumaron “Chicho” Vázquez, “Chochi” Loto, Roque Suárez, David Saavedra, Néstor Gómez, Mario Frágola, Miguel Geréz, “Tito” Lescano, “Kiko” Ibarra, Jesús Avellaneda, los hermanos Córdoba, “Pancalina” Torres, “Toti” Orellana, Raúl Morales, “Pichi” Rosales, “Koki” Luna y Martín Ayunta.
A fines de la década del 60 la presidencia estaba a cargo de Eduardo Atías y tras una prolífera gestión, el gobierno de la provincia les otorgó un subsidio de tres millones de pesos que invirtieron en la compra de nuevos terrenos cerca del barrio El Cruce. La historia volvía a repetirse, por que parecía que la institución estaba signada a ser bandeña y esfuerzo de por medio se construyó la cuarta y última sede hasta la actualidad. De esta manera Agua y Energía se convirtió en la única institución de Santiago del Estero que contó con cuatro canchas propias (Los Quiroga, La Guarida, Puerto Nuevo y La Banda).
Años más tarde se edificaron varias viviendas alrededor de la institución y el sector como era de esperar toma la denominación de la entidad deportiva y se convierte en el barrio Agua y Energía.

Los logros deportivos
Entre algunos memoriosos y otros que acunan recortes de diario, se pudieron rescatar algunas fecha de gran importancia para los energéticos, momentos únicos e irrepetibles para los amantes del fútbol, los campeonatos obtenidos.

En 1964 Agua y Energía se consagró campeón del torneo apertura de la Liga Cultural, la final fue disputada con el club Unión obteniendo un triunfo de 5 a 0.

En 1965, se consagró como el primer equipo campeón del torneo apertura nocturno, venció al club Mitre por 2 a 0 con goles de Coria y Dorado.

En 1971 fue subcampeón del torneo anual organizado por la Liga Cultural.

En 1972 se consagra campeón de la Liga Cultural de Fútbol ganándole a Central Córdoba (quién venia siendo triunfador durante 7 años consecutivos) por 2 a 1 con goles de “Chochi” Loto y “Pelé” Pérez, en cancha de Unión.
El equipo estaba conformado por Dante Ferrari, Segundo “Teri” Iñiguez, Héctor Saban, Juan Carlos “Coqui” Luna, Carlos “Queto” Gallardo, Manuel Loto, Ramón “Chochi” Loto, Hugo Hoyos, Guillermo Figueroa, Higinio “Pelé” Pérez, Rafael Ovejero, Antonio Tevez, Luciano Villavicencio, Roger Ibáñez, Félix Vázquez, Roque Alustiza, Eduardo Villavicencio, Elpidio Leguizamón, Juan Carlos Reyes y Néstor Gómez, quienes eran conducidos por Díaz Macia quien dejó el equipo unas fechas antes y su lugar lo toó Ramón “Chochi” Loto cumpliendo los roles de jugador y técnico.

En 1973 tras el importante logro obtenido, consigue el pase para participar del Torneo Regional zona norte, organizado por la Asociación del Fútbol Argentina (AFA), representando a Santiago del Estero .
En la oportunidad participaron San Martín de Tucumán, Vélez Sarfield de Catamarca, Juventud Antoniana de Salta y Agua y Energía de Santiago del Estero. Con una destacada participación obtuvo el subcampeonato, por un gol de diferencia, al caer como visitante ante Juventud Antoniana de Salta.

De la cima en pocos años el club se fue debilitando institucional y deportivamente hasta que en 1977 desciende a la Primera B.

El 28 de agosto de 1993, tras 16 años se consagra campeón invicto y asciende a la Primera División A, ganándole 5 a 1 a Clodomira.
El equipo campeón fue dirigido por Alberto Arias y estuvo formado por Coronel, Barrionuevo, Panzerini, Concha y Nediani, Baloy Díaz, Salegas, Beltrán, Sosa, Pérez y Sánchez. -Pasaron dos años donde los resultados no eran los esperados y el equipo descendió una vez más, sin embargo los hinchas jamás dejaron de apoyarlos pese a que querían la gloria.

El 8 de noviembre de 1997 Agua y Energía derrotó por penales al club Villa Unión y retornó a la Primera División A.
El equipo estuvo conformado por Coronel, Ibarra, Concha, Britos, Gerez, Díaz, Páez, Sánchez, R. Sosa y S. Sosa, en la oportunidad fueron conducido por Regatuzo.

Presidentes
A lo largo de los años tuvo como presidentes a Luís Campanini en Los Quiroga, Hernán Cortés en La Guarida y Puerto Nuevo y a este le siguieron Leocadio Figueroa, Hugo Espeche, Eduardo Atías, quien gestionó el subsidio para la compra de los terrenos en el actual barrio Agua y Energía. Ya en La Banda a Atías le sucedieron Francisco Fernández , en el ‘80 el club fue intervenido y se hizo cargo Osvaldo Raimundo Cisneros.
En 1982 asume Ceferino Gerez, en el ‘83 Juan Carlos Abrate, ‘87 Francisco García Piazza, ‘89 Basilio Sisalli. Del ‘98 al 2000 Humberto Lucero, 2001 Juan Carlos Ponce, Aldo Iñíguez, luego asume la Comisión Normalizadota integrada por Roger Suárez, Julio Arce y Ramón Peralta que decide llamar a elecciones y el 21 de julio de 2007 asume una vez más Francisco García Piazza.

Lo que lo definió como un club distinto La camiseta:
Al conformarse el equipo de fútbol de Unión Dique se debía definir el color de la camiseta, hubo muchas propuestas pero como una amplia mayoría de trabajadores que conformaban la comisión directiva eran de la ciudad de La Plata decidieron realizar un sorteo la casaca podía ser blanca y azul como la de Gimnasia y Esgrima o roja y blanca como la de Estudiantes. Por supuesto ganó la última y desde ese momento se convirtieron en los albirojos.

Hermanos:
A lo largo de la historia del club, cada uno de los equipos estuvo conformado por hermanos, los más recordados son: en Los Quiroga los Tevez , Iñiguez, Araujo y Saavedra, en La Guarida los Jiménez, en Puerto Nuevo los Iñiguez, Hoyos, Loto, Leguizamón, Coria, Gallardo y en La Banda los hermanos Jiriceck, Jiménez e Iñiguez.

La hinchada:
Francisco Bravo, primer arquero de la institución, contó a modo de anécdotas que cada vez que el equipo debía presentarse en La Banda o Santiago, desde Los Quiroga partían acompañados por seis camiones repletos de sus seguidores. “Venían familias enteras, éramos locales en cualquier cancha y ese cariño que ellos nos daban los jugadores los devolvíamos con resultados, salimos campeones de zona dos veces y siempre les peleamos de igual a igual a los grandes equipos”.

Comisión de damas:
Por supuesto, en aquellos años cuando la institución daba sus primeros pasos, las mujeres no tenían la posibilidad de formar parte de la comisión directiva ni de emitir opiniones al respecto sobre las gestiones que se hacían. Sin embargo las madres, esposas, hijas de los directivos y jugadores conformaron la denominada Comisión de damas.
Ellas se encargaban de que nada les faltase a los jugadores, la ropa en excelente estado, confeccionaban las banderas para alentar al equipo y las llevaban al concurrir a la cancha, hacían flores de papel para tirarle al equipo cuando ingresaba. La comisión no tuvo larga vida, pero es importante destacar que ningún hombre pudo opinar sobre las acciones que desempeñaron estas mujeres energéticas.

Energéticos de alma y vida:
Cuando jugaron la gran final en diciembre de 1972 y se consagraron campeones de la Liga Cultural de Fútbol, los barrios Agua y Energía y el Cruce estaban desiertos, todos, absolutamente todos los amantes de la camiseta albiroja se habían convocado a la cancha de Unión Santiago donde su equipo debía enfrentar al Central Córdoba.
Todos sabían que era el partido más difícil, pero confiaban en aquel equipo, estaban nerviosos y más ansiosos que nunca, pero brindando ese apoyo incondicional hasta el último segundo del encuentro cuándo Agua y Energía ganó por 2 a1. Aquel festejo fue inolvidable, hubo gritos, lágrimas, abrazos, eran los mejores y lo habían demostrado.
Dios les había concedido ese sueño, los rezos habían sido escuchados y se debía cumplir una promesa. Desde el estadio ubicado en el barrio chino, los jugadores, el cuerpo técnico, la comisión directiva y los hinchas partieron caminando hacia La Banda.
El número de personas llegó a ser incalculable, pero los que participaron de esa histórica marcha recuerdan que la multitud cubría el ancho y el largo del puente carretero.
El punto de llegada era la parroquia Nuestra Señora de Lourdes, allí los jugadores ofrendaron sus camisetas, los hinchas se inclinaron ante la imagen de la virgen en la gruta y el padre Eduardo Nabelino les impartió la bendición, esa era la promesa y la cumplieron, obtuvieron el triunfo y ofrendaron el sacrificio llenos de satisfacción.

Entrenamientos:
Néstor Gómez uno de los campeones del ‘72 contó que aquel equipo estaba integrado por jugadores de las divisiones inferiores del club. “Por eso ganar representaba más que un triunfo para nosotros y pese a los sacrificios entregábamos la vida en cada partido. Me acuerdo que era pleno invierno y entrenábamos en Puerto Nuevo, al finalizar la práctica debíamos ducharnos al aire libre y al terminar Artemio Iñiguez nos esperaba con una olla llena de mate cocido caliente y chipaco, era nuestra merienda y la recompensa, todo eso quedó grabado para siempre”.

Los requeridos por los grandes:
En su larga vida institucional, de las filas energéticas surgieron importantes jugadores que fueron a jugar a entidades de nivel nacional, por ejemplo San Lorenzo compró a Alberto Arias, Carlos Abregú y Juan Coria, mientras que tuvo a prueba a Ramón Loto y Carlos Godinal; Chacarita se llevó a Orlando Bucci, Talleres a Roger Ibáñez, Boca Juniors a Ricardo Barrientos y probó a Antonio Tévez, Walter Villalba, Néstor Iñiguez y Néstor Gómez.. En tanto que Atlético Municipal de Bolivia adquirió los pases de Mario Loto y Alberto Torres.

Don Segundo:
El 29 de agosto de 1993 el Nuevo Diario tituló una nota de la siguiente manera: “El patriarca”, esta hacía referencia a Don Segundo Iñiguez quien con 96 años a cuestas seguía yendo a apoyar al club de sus amores, el mismo que se delineó en su casa de Los Quiroga. Ese histórico día celebró emocionado el retorno de Agua y Energía a la División A, luego de 16 años.

Para todos:
Lo escrito resume la historia de una institución que nació de un sueño de muchos hombres unidos por una obra y el espíritu de lucha, por ello sus cimientos son tan fuertes que pese a los inconvenientes aún sigue de pie y con la esperanza de volver a conseguir el protagonismo que una vez tuvo.
Vaya este homenaje a los fundadores, a sus familias, a los jugadores que vistieron la camiseta y a los hinchas que tienen tatuado AYE en el corazón.


Fuente: La Banda Diario